Criaba animales para enviarlos al matadero pero hoy les protege
A todos nos encantan las historias sobre animales que luego de haber conocido el maltrato pasan el resto de sus vidas en paz, protegidos de toda crueldad.
Pero cuando estas historias tratan sobre animales de granja resultan verdaderamente inspiradoras. ¿La razón? Los animales de granja, atrapados dentro de la industria ganadera, son víctimas del peor maltrato animal conocido en la historia.
Afortunadamente, para algunos de ellos, también hay finales felices.
Mike Lanigan, un granjero de tercera generación dedicado a la cría de animales para la producción de carne, alimentaba a un ternero de su granja cuando, de pronto, tuvo una revelación.
Pensó que el destino de ese ternero estaba muy lejos de ser feliz. Él crecería y sería enviado al matadero y Lanigan, como muchas veces ya lo había hecho, «apagaría» una parte de su cerebro para sólo pensar en que debía pagar sus deudas y ganarse la vida.
Suscríbete gratuitamente a nuestro boletín y recibe las mejores noticias de actualidad sobre los animales y opciones de alimentación.
Pero ese día las cosas no ocurrieron como él esperaba: «De repente, encendí esa parte de mi cerebro». «Tal vez no tengo que matarte», le dijo al ternero.
Lanigan le preguntó a Edith Barabash, su cajera en el mercado donde vendía sus productos, si ella conocía otra manera en la cual pudieran hacer las cosas. Tras conversar, entre ambos surgió la idea de crear un refugio para animales de granja.
Desde que Lanigan manifestó sus intenciones a través de un video en línea por internet, la respuesta de la gente que lo vio fue rotundamente a favor.
Según Barabash, las personas han creído en la historia de Lanigan debido a lo fuera de lo común que es. Y aunque todo está marchando rápidamente, Lanigan piensa que, de igual manera, todo esto estaba destinado a ser así. «Las vacas que están aquí y las vacas que van a nacer aquí, van a morir aquí, y no por mi mano», asegura.
«Las vacas que están aquí y las vacas que van a nacer aquí, van a morir aquí, y no por mi mano».
La transición a un refugio de animales de granja le cambió la vida a Lanigan pero, sobretodo, a las vacas que ahora vivirán en paz hasta el final de sus vidas.
DEFIENDE LA MATERNIDAD
Los instintos maternales de una vaca fomentan un vínculo tierno con su vulnerable cría. Preserva esta tierna relación eligiendo alternativas de origen vegetal a los productos lácteos.
Fuentes: https://www.durhamregion.com/community-story/6872962-uxbridge-cattle-farmer-mike-lanigan-has-a-change-of-heart-decides-to-start-animal-sanctuary/ https://www.thedodo.com/farmhouse-garden-cattle-animal-sanctuary-1999401786.htm
